Además de las "categorías" ya enunciadas, los otros días pensé que existe una cuarta categoría: El limítrofe (o borderline). Es el varón que está muy cerca de ser gay pero no lo es (no todavía... quién sabe). Tiene su "parte femenina" a flor de piel y mironea en los vestuarios y baños públicos pero jamás lo admitiría. Muchos de sus amigos y allegados piensan que tal vez es gay pero él todavía no se enteró (y está convencido de que nadie se ha dado cuenta).
En fin, es el que mira por la cerradura del closet (del lado de adentro). O como decían en el barrio: "la mira con cariño". Pero OJO! no es gay. Está en la cornisa (sin Majul).
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